La pintora y grabadora Laura Márquez es una de las pioneras del arte moderno paraguayo, desde los años cincuenta. Vive en Nueva York, Estados Unidos, desde los años setenta, y ahora vuelve a realizar actividades en nuestro país.
En junio de 2007, había realizado un curso de técnicas de arte junto con Carlo Spatuzza. Un año antes se había realizado la muestra “Work in progress 1950… ” en la Manzana de la Rivera, donde se pudo apreciar una vasta muestra de su obra. En esa oportunidad se expuso su instalación “Las puertas inútiles”, compuesta de una serie de paneles de unos tres metros de altura. Fue la única oportunidad en que se vio esta obra en nuestro país, que, según documentos, forma parte del acervo del Centro de Artes Visuales/Museo del Barro, pero que la misma artista había entregado a la Universidad del Norte, al final de la exposición.
Laura Márquez nació en 1929 en Asunción. A los 18 años viajó a la Argentina y volvió a su país con los conocimientos modernos aprendidos en la Argentina e incidió decididamente en el arte paraguayo.
En Buenos Aires, en 1955, junto a sus colegas Julio Le Parc, Horacio J. Sofons y otros, inició el Movimiento Estudiantil de Reforma de las Escuelas de Bellas Artes. Fue vicepresidenta del Centro de Estudiantes de Artes Plásticas.
En 1961 obtiene el primer premio en el certamen de Murales para el Hotel Guaraní, Asunción. Su proyecto presentado no fue realizado, “por razones de presupuesto” alegadas por el ente organizador.
En los años setenta se muda a Nueva York y allí participa en diversas muestras y happenings en galerías, museos y en el Central Park.
Laura Márquez ha experimentado con todos los medios, materiales y herramientas disponibles, así como las diferentes técnicas artísticas.
Algunas de las series que ha realizado son “Cool Art” (del que forma su obra “ Seis meses de silencio”), “Caminos”, “Las cortinas”, “Las Torres”, “Las cruces” y “El grito” , basado en la obra del mismo nombre de Edward Munch.
En marzo de 2005, Laura Márquez recibió el título de Profesora Honoraria de la Universidad del Norte.
Imágen: Esteban Cabral